Tópicos

Ya, tópicos.

Soy un poco de todo,
aunque a veces no soy nada.
Me busco y me encuentro.
Hablo conmigo
y a veces dejo de buscarme.
Me pierdo en mi identidad,
me engaño, me lo creo,
me descubro,
me sorprendo.

A veces, de tanto escucharse
uno se vuelve loco.

Es entonces cuando vive.
O cree que vive.
Y vuelta a empezar,
¿quién soy?
Soy un poco de todo,
aunque a veces soy nada.
A veces me vuelvo loco.

A veces, de loco,
me encuentro.

Presente condicional

Qué fácil es creer que el tiempo lo pone todo en su lugar, tanto lo bueno como lo malo. Qué fácil es desentenderse y dejar que el destino haga y deshaga. Qué fácil es creer que si pasó fue por algo. Y que si tiene que pasar, pasará. Qué fácil es pasar de todo. Mirar hacia otro lado, ésa es tu especialidad.

Y qué fácil es creer que no pasa nada, que siempre estaré ahí. Qué fácil es pensar que como yo no hay nadie y que, simplemente por eso, estaré ahí. Porque estoy hecho para estar ahí. Para recibirte, para quererte de verdad, para hacerte sentir bien cuando todo lo demás duela, cuando los demás sean de mentira. Qué fácil es hacer daño.

Y qué fácil es dejarse engañar.

Y qué difícil es quererte, con lo fácil que llegó a ser.

Qué fácil será que todo desaparezca, que ya no esté cuando tú quieras. Tan fácil como lo que me dueles sin necesidad.

Y qué fácil será arrepentirse de todo cuando sea tarde. Qué fácil y qué asqueroso. Tú verás. Yo estoy a un beso de irme para siempre. A un beso, a una duda, a un abrazo por detrás. A una noche más en tu cama. Qué fácil fue hacerte el amor en ella. Y qué difícil lo fue para otros.

Qué fácil es recordar, y qué difícil será.

 

Hola

No, ni tú ni yo lo esperábamos.
En el fondo sí, pero no así.
Así, ¿cómo?
Así.

Así porque no podía ser de otra manera.
Porque mis manos echaban de menos tus lunares.
Porque la playa llevaba tiempo sin vernos.
Porque al final acabamos buscando la cama.

Y sudando.
Y durmiendo.

Y despertando de repente.
Saliendo con prisa.
El último autobús se escapa.

Pero siempre llegamos a tiempo,
incluso llegando tarde.

Y siempre es tan nunca,
que yo prefiero más ahora.

Y que no dejes de reír,
que tu risa me alegra todo.
Que en tus ojos nos veo el reflejo
y son tan bonitos
que de únicos son sólo tuyos.
Y míos a veces.

Que te quiero
y ya lo sabes.

Que ya era hora.

Hola.

Cuando…

Cuando es todo, pero es nada.
Cuando se cierran las puertas.
Cuando te vas de casa.

Cuando vuelves
y aparcas en la entrada.
Cuando te quedas a cenar.
Cuando el recuerdo
se vuelve más intenso.
Cuando era ayer.
Cuando llueve en la ventana.

Cuando vuelan las palabras,
cuando huyen las miradas.
Cuando los labios se preguntan.
Cuando nunca sabes nada.

Cuando es todo, pero es nada.
Cuando nada es lo que queda.
Cuando nada es de mentira,
cuando vuelve a ser mañana.

Cuando todo es de mentira.
Cuando es todo, pero es nada.

Algún día te lo diré

Odio que me robes las palabras.
Odio que lo hagas y sonrías.
Odio que lo hagas porque me gusta.
Y debería odiar que me guste.

Odio que me robes las palabras,
y no las que me arrancas de los labios.
Odio que me robes las que no digo.
Las que se quedan a medias,
las que pienso y tú no sabes.
Ésas, las que no me atrevo y te imaginas.
Las que a lo mejor me adivinas,
las que puede que sepas,
porque me las robas.

Adiós

Cobarde,
¿a quién pretendes engañar?

No sabes estar sola,
no te hagas la dura.
No me hables de falsa comodidad
y deja de morderte las uñas.

Deja de mirarme así.
Deja de fingir que me quieres.
Deja que te explique lo que son los caprichos.

Cobarde y mentirosa,
¡maldita sea!
Vete por donde has venido.
Y, escúchame bien:
no vuelvas jamás.

Abrázate al conformismo
cuando rompas a llorar.

Prefiero una cerveza.
Y otras cinco después.
Prefiero escribirte otra vez borracho,
y que sea la última.

No.
Prefiero mandarte a la mierda ahora,
y que sea ésta la última palabra que te escriba.

Adiós.

 

Pienso

Que lo supe desde que te vi,
que no te tenía que haber tocado.
Que viniste y te esquivé,
que mentiste y me esquivaste.
Que me hiciste un gran favor.

Que fuiste un espejismo
hasta que dejaste de serlo.
Que destripamos las noches
y desnudamos las distancias.
Que nos echamos de menos.

Y lo supe desde que te vi,
que no te tenía que haber tocado.

Que no me hice ni puto caso.

Tarde

Nunca es tarde.
Mientes.
Tarde es cuando llegas tarde,
y mañana será tarde,
aunque no lo suficiente para seguir perdida.

Del recuerdo sí se vive,
también de la mentira.
Ignorancia, bendita compañera.
El olvido…
El olvido nunca llega.

Ni tarde, ni pronto,
simplemente existe,
como existen las cosas que llegan tarde.